El sol comienza a morir, pero la temperatura apenas calienta en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, donde a las 7:45 de la noche se jugará el partido de ida de la final de la Copa Sudamericana, entre Junior y Atlético Paranaense.

Desde bien temprano, hinchas locales y brasileños llegaron a las inmediaciones del escenario deportivo para tomar la fila y bajo el inclemente sol decembrino aguardar por la apertura oficial de las puertas del escenario, la cual se adelantó unos minutos a lo planeado.

Las autoridades al considerar que todo estaba dado, abrió el escenario a las 4:49 de la tarde, para lentamente las tribunas comiencen a llenarse de aficionados.

Sin embargo, por algunos minutos hasta las 5:01 de la tarde el flujo de ingreso se frenó por coordinación con la Policía. Sin embargo, el impasse no revistió mayor inconveniente.

Antes de la apertura, la logística del partido ensayó himnos y todo el tema para asegurarse que el protocolo se cumplirá sin mayores sobresaltos.

El partido tendrá un alto flujo de aficionados, por lo cual se le pide a los hinchas llegar con tiempo al estadio para evitar las filas al ingreso.